La contaminación generada por los procesos del trabajo de metales es una mezcla variable de sólidos y contaminantes con distintos tamaños, densidades y pesos (polvo, aerosoles, humos y olores). La filtración del aire y de aerosoles contaminantes en el aire es esencial para mantener un entorno de trabajo seguro y saludable, eliminando el riesgo de inhalación de agentes nocivos para los operarios de las máquinas.